martes, abril 14, 2015

A un euro por alma

Somos una generación enferma, desde la raíz en las familias, a la representación general que llamamos "estado".

Darle a una persona un medio de vida asegurado, por nada, es convertirlo en un zombie en busca de motivaciones, y en caída libre de responsabilidades. Para volar hay que dejar caer primero.





El problema que tenemos todos es que nuestros antecesores han vivido una de las épocas más injustas, dolorosas, con catástrofes en número de víctimas, y en su economía, libertad y derechos, y en pensamiento. Me refiero a la historia de nuestros padres y abuelos. Ellos tuvieron una juventud de carencias, espoleándoles a generar y salir del nido jóvenes, mientras que el estado les trataba como ganado (y así continúa), pero con unos padres que en lugar de mimarlos los enseñaron a buscarse la vida. Y entonces, ¿qué nos ha pasado a nosotros? Pues no es tan sencillo de explicar, ... miento, sí que lo es (en parte):

Hay que tener en cuenta tres factores:


  • Abuelos que consiguieron tener unos derechos a costa de la vida de muchos de ellos.
  • Padres que vivieron una infancia dura y que empezaron a trabajar jóvenes privándose de una educación.
  • Un sistema que nos enfoca a estudiar modelos que no duran ni 4 años, dudablemente aceptados sin haber sido demostrada su eficacia, en un período de crisis, y con una elevada falta de modelos a seguir, perdidos entre tanto algodón: Subsidios, pagas, becas, ... +

Total, para que una mayoría tenga que salir del país y a pesar de ser los que parecen más perjudicados serán los que probablemente mejor parados salgan del asunto en cuestión.

No sólo tenemos problemas, porque existen soluciones, pero más concreto existe UNA solución para cada problema.

Y lo has de experimentar para entenderlo, y poder distinguir así cuál es la que necesitas tú. El que ha nadado en barro distingue un lodazal a primera vista, el resto se mantiene escéptico.

Seguramente la parte desconfiada de tu mente estaba diciendo "otro charlatán con la solución definitiva", al decir que había UNA solución, pensando que la iba a dar como verdad universal. Sólo habrás pensado esto si es la primera vez que me lees. Tranquilo/a, que pasa en las mejores familias, pero volvamos a las soluciones, no sin antes liberar esa pequeña 'autozancadilla' que nos ponemos. Permítete conocer otra opinión, otra opción. Cinco puntos para cambiar tu destino.

1. Define tus METAS: 


Pero que no sea sólo en base a tu sueldo (quiero ganar más), no. Tienes que especificar, y si es posible, que no sea el dinero tu principal objetivo. Ejemplo: Quiero ser más feliz; tener más tiempo libre; ver otros países; ayudar a mis vecinos y/o familia; (poder) tener animales donde viva en el futuro; etc... Cosas concretas. Y una vez sepas lo que quieres, el siguiente punto.

Una cosa más: Tu meta no es el camino, es una directriz. (O metas...).

2. ELIGE el camino: 


Ya sabes lo que quieres, pero no sabes cómo conseguirlo. Puede que seas trabajador, o emprendedor. FALSO. Todos somos emprendedores unipersonales, todos vendemos nuestra marca, nuestra persona, nuestro conocimiento y pericia, ya sea a una empresa que nos paga, o a miles o cientos de clientes que confían en nuestro trabajo.

El trabajo es trabajo, sea pagado o no, sea para una persona o un millón. Y no te valorarán más por cobrar menos, porque si has aceptado eso es que te has conformado con una condena perpetua. Libérate de esas cadenas, cambia el "chip" mental, y elige OTRO camino.

No pasa nada por "volver a empezar", en serio.

Estamos aquí para experimentar, aprender, y evolucionar.

Sal de tu zona de comfort.

El siguiente punto te ayudará a distinguir OPORTUNIDADES.

3. Haz "NETWORKING": 


Que manía con ponerle a todo nombres en otros idiomas, ¿no? Tiene su lógica: 'redeando' no existe, y en español se vuelve una frase pomposa: "Crear contactos a través de los que ya tienes, para acercarte a tus objetivos". Me refiero a LINKEDIN por supuesto, la única red donde la gente que se agrega pide una referencia o dudosamente te aceptan (y tú también deberías mostrarte reacio a aceptar a cualquiera).

Tu caso puede ser el de un profesor sin alumnos, o el de un informático buscando una empresa del sector de la informática (cualquiera) que le quiera pagar por ponerse en un ordenador, aunque no sea de la especialización que tiene, o el de un agente de seguridad sin nada que vigilar. Quizás sea hora de aplicar un giro de tuerca, ¿no crees?

Ya si tienes hijos tus miedos son aún peores, porque otros dependen de tí. Pues en tu caso MÁS AÚN, ya que no sólo importa su seguridad, sino el ejemplo que les darás, el legado y la formación que aprenden en casa. Si sois dos adultos a cargo, hacedlo por turnos: Primero uno que siga esta línea, y cuando la alcance, el otro.

Si quieres un resultado distinto, tendrás que hacer algo diferente. Y además, quizás no tienes nada que perder.

Cuando haces EL NETWORKING APROPIADO (ya haré un artículo sólo de ello), las oportunidades salen solas. La gente no te "tiene en su lista", sino que interactúan contigo, y tú con ellos. Es el boca a boca versión siglo XXI. Esa referencia que buscas, o ese contacto que te puso en el camino adecuado.


4. ESPECIALÍZATE: 


Nadie quiere, ni busca, ni compra, alguien que es experto en TODO. ¿Te imaginas a alguien que se te presenta como un "experto en todo"? Si tú ni le abrirías la puerta, otros tampoco lo harán contigo. Sé experto en tu camino.

Lee, estudia, aprende, PRACTICA. Ser experimentado no es lo mismo que ser experto, pero pensar que el talento crece en árboles, o que no es algo aprendido, es un error. O sea, EL TALENTO SE APRENDE. ¿Cómo? Con la experiencia: Hacer una y otra vez algo no sólo te hará mejor, sino que creará en tu cerebro zonas más desarrolladas para facilitar esa tarea. Está científicamente demostrado.

Aquí un artículo publicado en 2009-2010 por Jorge L. Arias, del departamento de neurociencia de la Universidad de Oviedo:

Cómo aprende nuestro cerebro (PDF)

Así que recuerda: Haz aquello que tú decidas hacer, todo lo que puedas, hasta que otros quieran, NECESITEN tu experiencia, tu consejo, o tu trabajo, o todas.

Especializarse es una inversión temporal (de tu tiempo) a largo plazo, que aumenta exponencialmente tus posibilidades.

Y no, no me refiero a que te saques mil titulitos, o un gran título.

El conocimiento es la verdadera recompensa per se. No persigas títulos que te "validen", demuestra con hechos que vales lo que sabes.

5. Define TU VALOR:

Cuánto debería significar pagarte, sea quien sea el que pague, por una hora de tu trabajo. 6 euros la hora no es una respuesta. Recuerda, "cambia el chip". ¿30 euros la hora? No me preguntes a mí, dependerá de tus METAS. Eso que te comenté al principio de los puntos.

Pero no te infravalores.

Te voy a contar un chiste, a lo mejor lo conoces, pero no te lo habías tomado en serio:


"Un día llaman a un técnico de ordenadores para reparar uno en la oficina, y se presenta la chica con un maletín lleno de herramientas. Eso da confianza a los jefes, que observan atentamente cuando ésta se dispone a abrir la caja del mismo, ya que no encendía la torre. Tras ojear durante un minuto tocando algunos interruptores y 'jumpers' se vuelve hacia ellos, les mira, luego a sus herramientas, y alcanza un destornillador de precisión, hace girar un mini tornillo media vuelta, y vuelve a dejar el destornillador en el maletín. Lo cierra, y les dice a los jefes: "Son 100 euros". A lo que estos responden "¿¡¡cómo!!?". Ella los mira con impasividad, a lo que uno de ellos responde diciendo "haremos una cosa, envíanos la factura y si estamos conformes una vez recibida, te pagaremos sin rechistar". Al cabo de dos días llega una carta con ésta, donde especifica lo siguiente: Apretar un tornillo media vuelta = 1 euro. (y justo en la siguiente línea...) Saber qué tornillo apretar = 99 euros."

Es un chiste, pero es cierto, y yo me lo tomo muy en serio. Tú también deberías. Vales lo que sabes, no lo que diga un papel, ni lo que otros te digan que debes valer. El que quiera tus servicios pagará por ellos, porque les estarás RESOLVIENDO UN PROBLEMA, y eso se paga.

Conclusión:


Tú no has tenido la culpa del camino que has llevado hasta ahora, PERO ERES RESPONSABLE DEL QUE ELIJAS AHORA. La consciencia en lo que hacemos viene con esa carga, y al mismo tiempo esa satisfacción.

Somos víctimas de un sistema que nos ha tasado muy baratos, a un euro por alma.

El cambio empieza por tí mismo.

De tí depende descartar ese papel gratuito, porque en el fondo nada es gratis, y asumir que eres el único héroe de tu vida. Tienes el poder de crear sonrisas, empezando por la tuya.